lunes, 27 de mayo de 2019

Más allá de ayer que fue 26M



Vaya panorama, la derecha, Partido Popular, Ciudadanos y  Vox, gobernará  tanto en el Ayuntamiento como en la Comunidad de Madrid.

Lo electoral es una partida, hemos perdido; en colectivo y en plural. Lo electoral es parte de la lucha. La lucha no se agota en lo institucional. Tampoco en lo inmediato. Las luchas nunca acaban.

Hay que mirarse, pero no fustigarse, hay responsabilidades gordas,  que cada quien las asuma en su proporción, sin culpa, porque aquí no caben las culpas, pero sí cada quien aceptar lo que le incumbe.

Nos corresponde re pensar y re imaginar a Podemos un proyecto que por muchas razones ha ido perdiendo.

Me siento triste y confrontada, pero también estoy convencida que la lucha es luchando. Organizar la digna rabia .

Enfrentamos tiempos muy duros, el avance de un proyecto imperial feminicida, racista y depredador de cuerpos, vidas y territorios, que parece imparable. Las calles son amplias y generosas. Ahí nos tendrán. Sin miedo.

La resistencia y la entereza, la fuerza ancestral nos acompañan. Las voces de abuelas y abuelos.

Hay mucho por lo que seguir poniendo el cuerpo y la ternura.

Las luchas colectivas, feministas y ecologistas.  Desde las voces y cuerpos migrantes, racializados y empobrecidos de quienes somos las subalternas de las subalternas, hoy tenemos mucho que decir y aportar.

Mi sonrisa intacta, que sonreír y seguir luchando es ya de por si un acto rebelde.

Siempre merece la pena. Seguirá mereciendo la pena. Seguimos.


Madrid, 27 de mayo en primavera.

Ana Marcela Montanaro Mena.