jueves, 8 de febrero de 2024

Enid Cruz Ramírez: Un feminismo sin paredes





Enid Cruz Ramirez, gracias por dar el paso y poner tu cuerpo en el proceso electoral municipal que culminó el domingo. No te voté por ser mujer. Yo de ese feminismo paso, porque no creo en la sororidad abstracta ni el empoderamiento que hoy nos venden las retóricas de feminismo frívolo y de identidades fragmentadas sin ningún tipo de perspectiva por construir comunidad. 

Te voté por ser una mujer con conciencia de clase, una mujer valiente, de izquierdas y una mujer coherente. Una mujer que ha tejido siempre lo colectivo echando andar un feminismo situado. El feminismo que has ayudado a construir está lejos de las retóricas neoliberales y frívolas que hoy campean en muchas de las expresiones del feminismo de la prosperidad y del género empoderado, esos feminismos que se parecen más a una sociedad anónima o a un club, haciéndose cómplices de la exlcusión y que bajo las retóricas de la equidad y sorororidad abstractas, fragmentan luchas sin ninguna aspiración real a la transformación radical, sobre todo para las mujeres empobrecidas y excluidas por este sistema colonial-racista-capitalista-patriracal.

Gracias, Enid, por plantarle cara a lo rancio, a las políticas excluyentes, al bipartidismo religioso, clientelar y corrupto, que aunque se vista a la moda, de género y equidad, sigue siendo lo mismi-tico, ese bipartidismo que ha empujado el neoliberalismo, al fundamentalismo religioso y a los autoritarismos. Por plantarle cara a los señoros y señoras, esos que cambian de ideas de acuerdo a su interés clientelar de trepar en lo local y nacional.
Te voté por tu fuerza, por la coherencia que te habita.

Es necesario contar la historia de ese feminismo del que aprendimos tantas, ese que echaste andar de la mano del Dr. Luis Guillermo Ortiz, nuestro Doctor Ortiz en el  Hospital sin Paredes, escribir  la historia de  Musade... El programa de defensoras populares, los grupos de ayuda y ese camino empedrado que has/hemos alivianado a tantas mujeres, caminos que has/hemos acompañado. Poner con tinta y sobre papel, el feminismo con conciencia y coherencia del que has sido partícipe.

Gracias por ser maestra y compañera de tantas de nosotras, por enseñarnos del feminismo siempre transgresor, situado, sin pretensiones, el feminismo necesario, ese que es verdadaderamente revolucionario. Ese que nunca ha sido excluyente, ese feminismo que suma compañeros y luchas por vidas que merezcan la pena ser vividas.

¡Un feminismo sin paredes!

Gracias, compañera. Maestra, siempre. 

Ana-Marcela Montanaro
AMS invierno y 5 de febrero 2024